Es un término que se utiliza para referirse a los productos que se emplean para tratar las afecciones de la piel., no enfermedades, ya que tiene más relación con la apariencia física. Es la disciplina científica que se ocupa del estudio y fabricación de productos para aplicación tópica, tanto terapéuticos como cosméticos.
El concepto de dermocosmética es bastante reciente, se comenzó a utilizar en los años 60 y fue a partir de ahí que se internacionalizó, siendo su uso hoy en día muy común en el sector sanitario.
Este tipo de productos cuenta con una selección de principios activos muy enfocada a evitar reacciones alérgicas con el objetivo de garantizar la salud dérmica de sus consumidores centrando los esfuerzos en solucionar los problemas relacionados con los desequilibrios de la piel, por este motivo, la dermocosmética es mucho más eficaz a la hora de tratar problemas de la piel como pueden ser las arrugas, manchas en la piel, psoriasis, dermatitis, caída del cabello o el acné, entre otros.