Principalmente la calidad biótica de la persona y su nivel de salud. Para ello se utilizan diferentes escalas de mediciones.
Generalmente la calidad biótica de una persona, está determinada por la calidad biótica del lugar en el que se encuentra, donde trabaja o incluso donde duerme, y puede que ésta indique si habitualmente pasa la mayoría de su tiempo sobre una geopatía lo que produce esos desequilibrios pudiendo llevar incluso a la enfermedad.
Detectando el estado de salud y energía vital es posible encontrar aquello que te impide vivir de forma equilibrada. A partir de aquí se puede equilibrar, sanar, liberar, corregir o eliminar las cargas energéticas que pueden estar en el cuerpo físico y/o en los cuerpos energéticos que componen el ser (emocional, mental, astral, etc). Armonizando el funcionamiento de los chacras y los posibles bloqueos, lazos o amarres que puedan existir.
Por otro lado se pueden limpiar y neutralizar aspectos del tipo espiritual como son las presencias, entidades o envíos de otras personas que suelen afectar negativamente a la salud. Los síntomas típicos son la aparición de cansancio acusado sin razón, dolor en la parte superior de la espalda, pensamientos negativos o de muerte reiterados, depresión, mareos o dolores de cabeza, etc, pudiendo experimentar diferentes formas de llevar una carga que no es suya.
Aplicando el protocolo de sanción de personas es como se llega a la sanación para que se restablezca el equilibrio natural de todo tu ser.
También, debo añadir que con la radiestesia todo es testable, medible o cuantificable, por lo que no hay límites a la hora de trabajar en una sesión. Este aspecto hace que su uso aporte un gran valor amplificando exponencialmente la información que se puede obtener al igual que los resultados.